Capítulo 11: Producción Orgánica de Vegetales
Autores: Stephen Reiners, et al.
Guía traducida al español por el equipo de Futuro en Ag, Cornell Small Farms Program. 2024. A continuación.
11.1 Certificación Orgánica
Para usar una etiqueta de orgánico certificado, las operaciones agrícolas que generan más de $5,000 al año en productos orgánicos deben estar certificadas por una agencia certificadora acreditada por el Programa Nacional Orgánico del Departamento de Agricultura de los EE. UU (U.S. Department of Agriculture National Organic Program (NOP por sus siglas en inglés)). La elección del certificador puede estar dictada por el procesador o por el mercado objetivo. Una lista de certificadores acreditados que operan en Nueva York está recopilada en las páginas de Alimentos y Agricultura Orgánica del Departamento de Agricultura y Mercados del Estado de Nueva York: https://agriculture.ny.gov/farming/organic-foods-and-farming. Más detalles sobre certificación y regulación en la Sección 11.4.1 Requisitos de Certificación y en la Sección 11.7: Uso de Pesticidas Orgánicos.
11.2 Plan de Agricultura Orgánica
Un plan de agricultura orgánica es central en el proceso de certificación. El plan del negocio agrícola describe los sistemas de producción, manejo y registro, y demuestra a los certificadores una comprensión de las prácticas orgánicas para un cultivo específico. El proceso de desarrollar el plan puede ser muy valioso para anticipar problemas y desafíos potenciales, y fomenta la visión del negocio agrícola como un sistema integral.
La gestión del suelo, los nutrientes, las plagas y las malas hierbas están todas interrelacionadas en los negocios agrícolas orgánicos y deben ser gestionados en conjunto para lograr el éxito. Las organizaciones certificadoras pueden proporcionar una plantilla para el plan del negocio agrícola. La siguiente descripción del plan del negocio agrícola proviene del sitio web del NOP:
La Ley de Producción de Alimentos Orgánicos de 1990 (OFPA o Ley) exige que todas las operaciones de cultivo, cultivo silvestre, ganado y manejo que requieran certificación presenten un plan del sistema orgánico a su agente certificador y, cuando sea aplicable, al Programa Orgánico Estatal (SOP). El plan del sistema orgánico es una descripción detallada de cómo una operación logrará, documentará y mantendrá el cumplimiento de todas las disposiciones aplicables en la OFPA y estas regulaciones. El agente certificador debe concordar en que el plan del sistema orgánico propuesto cumple con los requisitos del subapartado C, y cualquier modificación posterior del plan orgánico por parte del productor o encargado debe recibir la aprobación del agente certificador.
Más detalles se pueden encontrar en: el sitio web del Programa Nacional Orgánico del Servicio de Comercialización Agrícola
(https://www.ams.usda.gov/about-ams/programs-offices/national-organic-program).
11.3 Salud del Suelo
Un suelo saludable es la base de la agricultura orgánica. Las adiciones regulares de materia orgánica en forma de cultivos de cobertura, compost o estiércol crean un suelo biológicamente activo, con buena estructura y capacidad para retener nutrientes y agua (es importante señalar que cualquier aplicación de estiércol crudo debe realizarse al menos 120 días antes de la cosecha). Los materiales vegetales en descomposición activarán una amplia diversidad de microbios, incluidos aquellos que descomponen la materia orgánica en nutrientes disponibles para las plantas, así como otros que compiten con los patógenos de las plantas en la superficie de las raíces.
La rotación entre familias de cultivos puede ayudar a prevenir la acumulación de enfermedades que sobreviven al invierno en el suelo. La rotación con un cultivo de grano, preferiblemente un césped que permanezca en su lugar durante una o más temporadas, priva a muchos organismos causantes de enfermedades de un huésped y también contribuye a una estructura de suelo saludable que promueve un crecimiento vigoroso de las plantas. Las mismas prácticas son efectivas para prevenir la acumulación de nematodos que dañan las raíces en el suelo, pero tener en cuenta que ciertos cultivos de grano también son huéspedes para algunas especies de nematodos.
La rotación entre cultivos con fechas de siembra tempranas y tardías puede ayudar a prevenir la acumulación de poblaciones de malezas. Los agricultores orgánicos deben prestar atención a la conexión entre el suelo, los nutrientes, las plagas y las malezas para tener éxito. Un recurso excelente para obtener información adicional sobre suelos y salud del suelo es Building Soils for Better Crops, 3ª edición, por Fred Magdoff y Harold Van Es, 2010, disponible en SARE, Investigación y Educación en Agricultura Sostenible: https://www.sare.org/resources/building-soils-for-better-crops-3rd-edition/. Para más información, consultar el sitio web de Cornell Soil Health (http://soilhealth.cals.cornell.edu/).
11.4 Cultivos de Cobertura
A diferencia de los cultivos comerciales, que se cultivan para obtener un beneficio económico inmediato, los cultivos de cobertura se cultivan por su valioso efecto sobre las propiedades del suelo y en los cultivos comerciales posteriores. Los cultivos de cobertura ayudan a mantener la materia orgánica del suelo, mejoran la estructura del suelo, previenen la erosión y ayudan en la gestión de nutrientes. También pueden contribuir al manejo de malezas, aumentar la infiltración de agua, mantener poblaciones de hongos beneficiosos y ayudar a controlar insectos, enfermedades y nematodos.
Para ser efectivos, los cultivos de cobertura deben ser tratados como cualquier otro cultivo valioso en la plantación agrícola, considerando cuidadosamente sus requisitos culturales, duración, recomendaciones de siega, métodos de incorporación, y su susceptibilidad, tolerancia o antagonismo a patógenos de la raíz y otras plagas. Algunos cultivos de cobertura y cultivos comerciales comparten susceptibilidad a ciertos patógenos y nematodos.
Se requiere una planificación y monitoreo cuidadoso al elegir una secuencia de cultivos de cobertura para evitar aumentar los problemas de plagas en los cultivos comerciales posteriores. "Crop Rotation on Organic Farms: A Planning Manual" (https://www.sare.org/resources/crop-rotation-on-organic-farms/) es un recurso valioso para optimizar las rotaciones. Consultar la Sección 11.6: Manejo de Nutrientes de Cultivos y Suelos para obtener más información sobre cómo los cultivos de cobertura encajan en un plan de manejo de nutrientes.
Se requiere que un agricultor orgánico certificado plante semillas de cultivos de cobertura certificadas como orgánicas. Si, después de contactar al menos a tres proveedores, la semilla orgánica no está disponible, el certificador puede permitir el uso de semillas convencionales no tratadas. Los proveedores deben proporcionar una prueba de pureza para las semillas de cultivos de cobertura.
Siempre inspeccionar la semilla en busca de contaminación con semillas de malezas y devolverla si no está limpia. Las semillas de cultivos de cobertura son una vía común para la introducción de nuevas especies de malezas en las plantaciones agrícolas.
11.4.1 Objetivos y Calendario para los Cultivos de Cobertura
Incorporar regularmente cultivos de cobertura en el plan de rotación de cultivos puede resultar en un aumento de los rendimientos del cultivo comercial subsiguiente. Se deben establecer objetivos al elegir un cultivo de cobertura; por ejemplo, agregar nitrógeno, sofocar malezas o interrumpir un ciclo de plagas. El cultivo de cobertura podría cumplir mejor con algunos de estos objetivos si permanece en su lugar durante toda la temporada de crecimiento. Si esto no es práctico, un compromiso podría ser cultivar el cultivo de cobertura entre los cultivos comerciales de verano.
Deja pasar dos o más semanas entre la incorporación del cultivo de cobertura y la siembra del cultivo comercial para permitir la descomposición del cultivo de cobertura, lo que mejorará el lecho de semillas y ayudará a evitar efectos alelopáticos no deseados en el próximo cultivo comercial. Otra opción es superponer los ciclos de vida del cultivo de cobertura y el cultivo comercial mediante la sobresiembra, intersiembra o cultivo intercalado del cultivo de cobertura entre las filas del cultivo comercial en la última etapa de cultivo.
Dejar el residuo del cultivo de cobertura en la superficie del suelo podría facilitar su inclusión en una rotación de cultivos y ayudará a conservar la humedad del suelo, pero parte del nitrógeno contenido en el residuo se perderá en la atmósfera, y la materia orgánica total añadida al suelo se reducirá. Enterrar el cultivo de cobertura acelerará la descomposición y liberación de nitrógeno del residuo del cultivo. Los recursos para determinar el mejor cultivo de cobertura para cada situación incluyen:
- Guía de Cultivos de Cobertura para Productores de NY -
- SARE cultivos de cobertura para rotaciones sostenibles -
www.sare.org/resources/cover-crops/
- Manejo Rentable de Cultivos de Cobertura -
www.sare.org/resources/managing-cover-crops-profitably-3rd-edition/
- Herramientas de Apoyo a la Decisión de Cultivos de Cobertura del Consejo del Noreste de Cultivos de Cobertura -
(https://covercrop-selector.org/)
11.4.2 Cultivos de Cobertura de Leguminosas
Las leguminosas son el mejor cultivo de cobertura para aumentar el nitrógeno disponible en el suelo. Estas plantas tienen bacterias simbióticas llamadas rizobios, que viven en sus raíces y convierten el nitrógeno atmosférico presente en los poros del suelo en amonio, una forma de nitrógeno que las raíces de las plantas pueden utilizar.
Cuando el cultivo de cobertura se siega, muere durante el invierno o se incorpora al suelo, el nitrógeno se libera y está disponible para el próximo cultivo. Dado que la mayor parte de este nitrógeno proviene del aire, hay una ganancia neta de nitrógeno en el suelo. Se puede asumir que aproximadamente el 50 por ciento del nitrógeno fijado estará disponible para que el cultivo lo utilice en la primera temporada, aunque esto puede variar dependiendo de la madurez de la leguminosa, las condiciones ambientales durante la descomposición, el tipo de leguminosa cultivada y el tipo de suelo. Para más información sobre cultivos de cobertura de leguminosas, consultar la Sección 8.5.2.
Es común inocular la semilla de leguminosa con rizobios antes de la siembra, pero el inoculante debe estar aprobado para su uso en sistemas orgánicos. Solicitar una verificación por escrito de la aprobación orgánica al proveedor y confirmar esto con el certificador de negocios agrícolas orgánicos antes de inocular la semilla.
11.4.3 Cultivos de Cobertura No Leguminosos
La cebada, el centeno, el raigrás, el pasto Sudán, el trigo, la avena y otros cultivos de grano que se dejan en la superficie o se incorporan al suelo como abonos verdes o residuos secos en la primavera son beneficiosos porque capturan el nitrógeno que de otro modo podría lixiviarse del suelo. Si se incorporan, permitir al menos dos semanas para la descomposición antes de la siembra para evitar el impacto negativo en el establecimiento del cultivo debido al material en descomposición activa. Tres semanas podrían no ser suficientes si los suelos están muy fríos.
En años húmedos, la presencia de residuos de cultivos de cobertura puede aumentar el daño por babosas. Para más información sobre cultivos de cobertura no leguminosos, consultar la Sección 8.5.1.
11.4.4 Cultivos de Cobertura Biofumigantes
Se ha demostrado que ciertos cultivos de cobertura inhiben malezas, patógenos y nematodos al liberar químicos volátiles tóxicos cuando se incorporan al suelo como abonos verdes y son degradados por microbios, o cuando las células se descomponen al picarlas finamente. La degradación es más rápida cuando el suelo está cálido y húmedo. Estos cultivos de cobertura biofumigantes incluyen el pasto Sudán, los sorgos-sudaneses y muchos de la familia de las brasicáceas. Se han comercializado variedades de mostaza y rúcula desarrolladas con altos niveles de glucosinolatos para maximizar la actividad biofumigante (por ejemplo, las marcas Caliente 199 y Nemat).
Prestar atención a los requisitos culturales de los cultivos de cobertura para maximizar su crecimiento. El fertilizante aplicado a los cultivos de cobertura será absorbido y luego devuelto al suelo para ser utilizado por el cultivo comercial después de que el cultivo de cobertura sea incorporado. Los cultivos de cobertura biofumigantes, como la mostaza, deben permitirse crecer hasta su tamaño completo, normalmente varias semanas después de que comience la floración, pero deben incorporarse antes de que las semillas se vuelvan marrones y duras, lo que indica que están maduras.
Para minimizar la pérdida del biofumigante, picar finamente el tejido temprano en el día, cuando las temperaturas son bajas. Incorporarlo inmediatamente mediante el arado, preferiblemente con un segundo tractor que siga al picador. Sellar ligeramente la superficie del suelo utilizando un rodillo compactador y/o 1/2 pulgada de agua de riego o lluvia para ayudar a atrapar los volátiles y prolongar su persistencia en el suelo. Esperar al menos dos semanas antes de plantar un cultivo subsiguiente para reducir el potencial de que los productos de descomposición dañen el cultivo, lo que se conoce como fitotoxicidad.
Rascar la superficie del suelo antes de plantar liberará el biofumigante restante. Este efecto biofumigante no es predecible ni consistente. Los niveles de los compuestos activos y la capacidad de supresión pueden variar según la temporada, la variedad del cultivo de cobertura, la madurez en el momento de la incorporación, la cantidad de biomasa, la finura del picado, la rapidez con que se incorpore el tejido, la diversidad microbiana del suelo, la estructura del suelo y la densidad de la población microbiana.
11.5 Selección de Terreno
Para la producción orgánica, es necesario dar prioridad a los campos con una excelente estructura del suelo, alta materia orgánica, buen drenaje y flujo de aire, poblaciones de malezas manejables y niveles de nutrientes equilibrados.
11.5.1 Requisitos de Certificación
Las agencias certificadoras tienen requisitos que afectan la selección de campos. Los campos no pueden ser tratados con productos prohibidos durante tres años antes de la cosecha de un cultivo certificado como orgánico. Se requieren zonas de amortiguamiento adecuadas entre cultivos orgánicos certificados y cultivos cultivados convencionalmente. Las zonas de amortiguamiento deben ser una barrera, como un canal de desvío o un seto denso, o estar a una distancia lo suficientemente grande como para evitar la deriva de materiales prohibidos hacia los campos orgánicos certificados. La determinación de la zona de amortiguamiento necesaria variará según el equipo utilizado en el terreno no certificado adyacente.
Por ejemplo, el uso de equipos de pulverización a alta presión o aplicaciones aéreas de pesticidas en campos adyacentes aumentará el tamaño de la zona de amortiguamiento. El polen de cultivos modificados genéticamente también puede ser un contaminante. No se debe cultivar un cultivo orgánico cerca de un cultivo genéticamente modificado de la misma especie. Consultar con el certificador los requisitos específicos de amortiguamiento. Estas zonas de amortiguamiento comúnmente varían entre 20 y 250 pies dependiendo de las prácticas del campo adyacente.
11.5.2 Plan de Rotación de Cultivos
Un plan de rotación de cultivos cuidadoso es la piedra angular de la producción de cultivos orgánicos, ya que permite al cultivador mejorar la calidad del suelo y gestionar proactivamente las plagas. Aunque cultivar una amplia gama de cultivos complica el proceso de planificación de la rotación de cultivos, asegura diversidad en los residuos de cultivos en el suelo y una mayor variedad de organismos beneficiosos del suelo. Las plantación agrícolas orgánicas individuales varían ampliamente en los cultivos cultivados y sus objetivos finales, pero algunas reglas generales se aplican a todas las plantaciones agrícolas orgánicas en cuanto a la rotación de cultivos.
Rotar los campos individuales alejándolos de cultivos dentro de la misma familia es crítico y puede ayudar a minimizar las enfermedades específicas de los cultivos y las plagas de insectos no móviles que persisten en el suelo o sobreviven al invierno en el campo o en los bordes del campo. Las plagas que persisten en el suelo, tienen un amplio rango de huéspedes o son transportadas por el viento, serán difíciles de controlar mediante la rotación de cultivos. Por el contrario, cuanto más específico para el huésped, no móvil y de corta duración sea una plaga, mayor será el potencial para controlarla mediante la rotación de cultivos. El tiempo requerido para una rotación de cultivos se basa en la plaga particular y su severidad. Algunas plagas particularmente difíciles pueden requerir un período de barbecho (que no se siembra durante uno o más años). Dividir la plantación agrícola en unidades de manejo ayudará a organizar las rotaciones de cultivos y asegurar que todas las partes de la plantación agrícola tengan suficientes descansos de cada tipo de cultivo.
Una rotación de cultivos bien planificada es clave para el manejo de malezas. Los cultivos de temporada corta, como la lechuga y la espinaca, se cosechan antes de que muchas malezas lleguen a producir semillas, mientras que las cucurbitáceas enredaderas, con su tiempo limitado de cultivo y larga temporada de crecimiento, permiten que las malezas produzcan semillas antes de la cosecha. Incluir cultivos de temporada corta en la rotación ayudará a reducir las poblaciones de malezas, siempre que el campo se limpie prontamente después de la cosecha.
Otras estrategias para reducir las malezas en la rotación incluyen cultivar cultivos acolchados, cultivos comerciales competitivos, cultivos de cobertura de corta duración o cultivos que puedan ser cultivados intensivamente. Las especies de malezas individuales emergen y maduran en diferentes momentos del año, por lo tanto, alternar entre cultivos plantados en primavera, verano y otoño ayuda a interrumpir los ciclos de vida de las malezas.
Las secuencias de cultivos comerciales y de cobertura también deben tener en cuenta las necesidades de nutrientes de los diferentes cultivos y la respuesta de las malezas a los niveles altos de nutrientes. Los niveles excesivos de fósforo y potasio en el suelo pueden agravar las especies de malezas problemáticas. Una secuencia de cultivo que alterne entre cultivos con altos y bajos requisitos de nutrientes puede ayudar a mantener el equilibrio de nutrientes. El cultivo con bajos requisitos de nutrientes puede ayudar a utilizar los nutrientes de un cultivador pesado previo (Tabla 11.4.1).
La siembra de otoño de un cultivo de cobertura no leguminoso ayudará a retener el nitrógeno no utilizado por el cultivo anterior. Este nitrógeno se libera cuando el cultivo de cobertura se incorpora en la primavera.
Alternar cultivos que produzcan abundante materia orgánica, como los cultivos de heno y los cultivos de cobertura de leguminosas de grano, con aquellos que producen menos, como las verduras, ayudará a mantener los niveles de materia orgánica y promover una buena estructura del suelo. Los cultivos o cultivos de cobertura de raíces profundas en la rotación pueden ayudar a deshacer las capas de suelo compactadas. Consultar Crop Rotation on Organic Farms: A Planning Manual para más detalles.
Tabla 11.5.1 Requisitos Nutricionales de los Cultivos
| Necesidades de Nutrientes | ||
|---|---|---|
| MENORES | MEDIANAS | MAYORES |
| frijol | pepino | remolacha |
| zanahoria | berenjena | brócoli |
| hierbas | hojas de brássica | repollo |
| arvejas | pimiento | coliflor |
| rábano | calabaza | maíz |
| espinaca | lechuga | |
| acelga | papas | |
| calabacín | tomate | |
| calabaza de invierno |
Adaptado de Crop Rotation on Organic Farms: A Planning Manual. Charles L. Mohler y Sue Ellen Johnson, editores.
11.5.3 Historial de Plagas
El conocimiento sobre el historial de plagas de cada campo es necesario para planificar una estrategia de cultivo exitosa. La germinación puede verse reducida en campos con historial de Pythium o Rhizoctonia. Evitar los campos que contengan infestaciones graves de malezas perennes como el cyperus rotundus (sedge de nuez), el convolvulus arvensis (correhuela) y el quackgrass, ya que estas malezas son particularmente difíciles de controlar.
Puede ser necesario dedicar uno o más años a la reducción de poblaciones de malezas utilizando barbecho cultivado y cultivos de cobertura antes de que los cultivos orgánicos puedan crecer exitosamente en esos campos. Los cultivos susceptibles no deben cultivarse en campos con historial de moho blanco de Sclerotinia sin una rotación de varios años con maíz dulce o cultivos de grano. Alternativamente, tratar con Contans WG™ para reducir los esclerocios fúngicos en el suelo inmediatamente después de cosechar un cultivo infectado.
Muchos cultivos de hortalizas son hospedadores tanto del nematodo de nudos de raíz (Meloidogyne hapla) como del nematodo de lesiones en las raíces (Pratylenchus penetrans). Es importante saber si estos nematodos están presentes en el campo para desarrollar rotaciones y secuencias de cultivos a largo plazo que reduzcan las poblaciones en campos con alta infestación o minimicen su aumento en campos con niveles bajos o nulos de infestación.
11.5.4 Drenaje del Suelo y del Aire
Con la excepción de los oídios, la mayoría de los patógenos fúngicos y bacterianos necesitan agua libre en el tejido de la planta o alta humedad durante varias horas para infectar. Cualquier práctica que promueva el secado de las hojas o el drenaje del exceso de agua de la zona de las raíces minimizará las condiciones favorables para la infección y el desarrollo de enfermedades.
Los campos con un mal movimiento del aire, como aquellos rodeados de barreras vivas o bosques, hacen que las hojas permanezcan húmedas. Planta las hileras en paralelo a los vientos predominantes, que generalmente son en dirección este-oeste, y evita el hacinamiento para promover el secado del suelo y reducir la humedad en el dosel de la planta.
11.6 Manejo de Malezas
El manejo de malezas puede ser uno de los mayores desafíos en las plantaciones orgánicas, especialmente durante la transición y los primeros años de producción orgánica. Para tener éxito, se puede utilizar un enfoque integrado para el manejo de malezas que incluya rotación de cultivos, cultivos de cobertura, cultivo y diseño de plantación, basado en la comprensión de la biología y ecología de las especies de malezas dominantes.
Un enfoque a varios años que incluya estrategias para controlar las especies de malezas problemáticas en una secuencia de cultivos generalmente será más exitoso que intentar manejar las malezas de cada año a medida que aparecen.
11.6.1 Registro de Datos
Realizar un seguimiento y desarrollar un inventario escrito de las especies de malezas y su gravedad en cada campo. La identificación precisa de las malezas es esencial. Las aplicaciones para smartphones, como iNaturalist, Pl@ntNet y PictureThis, pueden proporcionar un excelente punto de partida para la identificación, pero deben ser verificadas por educadores de extensión o con el libro Weeds of the Northeast.
También consultar los sitios web Cornell Weed Ecology y Rutgers Weed Gallery para obtener fichas informativas sobre malezas. Los planes de manejo deben centrarse en las especies de malezas más desafiantes y potencialmente limitantes para el rendimiento en cada campo, asegurándose de enfatizar las opciones que no agraven otras especies presentes. Alternar entre cultivos plantados en épocas tempranas y tardías, y entre cultivos de temporada corta y larga en la rotación puede ayudar a minimizar la acumulación de una maleza o grupo de malezas con ciclos de vida o hábitos de crecimiento similares, y también proporcionará ventanas para una variedad de cultivos de cobertura.
11.6.2 Métodos de Manejo de Malezas
El equipo de siembra y cultivo debe configurarse con el mismo espaciamiento de hileras y número de hileras para minimizar las pérdidas de cultivos y el daño a las raíces durante el cultivo. Puede ser necesario adquirir equipo especializado para controlar eficazmente las malezas en algunos cultivos. "Apilar" o utilizar más de un tipo de implemento en un cultivador generalmente mejora la efectividad, especialmente si se usa de manera sinérgica. Si se utilizan implementos en la hilera, como los desmalezadores de dedos, se requiere una dirección precisa, que se puede lograr mediante montajes en el centro, dirección lateral del cultivador o sistemas de guía por cámara/GPS. Consultar los recursos al final de esta sección para ayudar a ajustar el sistema de manejo de malezas.
Cuando sea una opción, trasplantar en lugar de sembrar directamente permite que el dosel se cierre más rápidamente y puede reducir el desarrollo de malezas en la hilera para algunos cultivos.
Plantar sobre acolchado de plástico negro es otra estrategia para mejorar el control de malezas en cultivos que requieren calor, ya que el acolchado previene la germinación de malezas en el área inmediata cerca del cultivo. Cultivar los pasillos entre camas cubiertas de plástico con rastras. Para evitar problemas de malezas a lo largo de los bordes del plástico, usar cuchillos vegetales para cortar el margen del plástico o usar discos de aporque o “spider gangs” para lanzar tierra adicional sobre el borde del plástico y enterrar las malezas. Estas cultivaciones serán más efectivas cuando las malezas están pequeñas.
El acolchado de paja es una alternativa al plástico negro, pero enfriará el suelo y lentizará el desarrollo del cultivo. La paja también puede usarse para suprimir malezas entre camas cubiertas de plástico. Sin embargo, los roedores pueden anidar en la paja y luego alimentarse de cultivos frutales. Si se utiliza paja sin plástico, rastrar las malezas y/o cultivar en intervalos de 10-14 días hasta que el crecimiento del cultivo impida más cultivo, luego colocar la paja lo antes posible.
Para un control efectivo de malezas, colocar 3 pulgadas de material en pacas comprimidas o 6 pulgadas de paja suelta, que se puede dispersar mediante una cañón de hidrosiembra (hydro-seeding cannon) o una picadora de pacas (bale chopper).
Recursos:
- Identificación de Malezas de Cornell - blogs.cornell.edu/weedid/
- Recursos de Manejo Integrado de Malezas de NYS IPM
- Sitio web de Ciencias de Malezas de Cornell - https://cals.cornell.edu/weed-science
- "Steel in the Field" - www.sare.org/resources/steel-in-the-field/
- "Vegetable Farmers and their Weed-Control Machines" - www.youtube.com/playlist?list=PL7TYEW-aB6ckVgQc96wK9wvbZIHNI406n
- ATTRA Manejo Sostenible de Malezas para Granjas Pequeñas y Medianas
- Para recomendaciones específicas de manejo de malezas según el cultivo, consultar las Guías Orgánicas para Vegetales de Cornell
11.7 Manejo de Nutrientes en Cultivos y Suelos
Para producir un cultivo saludable, los nutrientes solubles deben estar disponibles en el suelo en cantidades que cumplan con los requisitos mínimos para toda la planta. Las necesidades totales de nutrientes de un cultivo son mucho mayores que solo los nutrientes que se eliminan del campo cuando se cosecha ese cultivo. Todas las raíces, tallos, hojas y otras partes de la planta requieren nutrientes en momentos específicos durante el crecimiento y desarrollo de la planta.
El desafío en los sistemas orgánicos es equilibrar la fertilidad del suelo para proporcionar estos nutrientes necesarios en un momento y en niveles suficientes para apoyar el crecimiento saludable de la planta. Las restricciones en cualquiera de los nutrientes necesarios harán más lento el crecimiento y pueden reducir la calidad y el rendimiento del cultivo.
Los agricultores orgánicos a menudo hablan de alimentar el suelo en lugar de alimentar a la planta. Una afirmación más precisa es que los agricultores orgánicos centran su programa de fertilidad en alimentar a los microorganismos del suelo en lugar de la planta. Los microbios del suelo descomponen la materia orgánica para liberar nutrientes y convertirla en formas más estables como el humus. Esta descomposición de la materia orgánica del suelo ocurre durante toda la temporada de crecimiento, dependiendo de las temperaturas del suelo, la disponibilidad de agua y la calidad del suelo. Los nutrientes liberados se mantienen en las partículas del suelo o en el humus, haciéndolos disponibles para los cultivos vegetales o cultivos de cobertura para el crecimiento de las plantas.
Enmendar los suelos con compost, cultivos de cobertura o residuos de cultivos también proporciona una fuente de alimento para los microorganismos del suelo y, cuando se incorporan al suelo, reinicia el ciclo de nutrientes.
Durante los años de transición y los primeros años de producción orgánica, la enmienda del suelo con compost o estiércol animal puede ser una estrategia productiva para aumentar la materia orgánica, la actividad biológica y los niveles de nutrientes del suelo. Sin embargo, esta práctica de uso intensivo de compost o estiércol no es sostenible a largo plazo. Si se aplican compost y estiércol en las cantidades necesarias para satisfacer las necesidades de nitrógeno del cultivo, es posible que se agregue fósforo en niveles más altos de los requeridos por la mayoría de los cultivos de hortalizas.
Este exceso de fósforo se acumulará gradualmente hasta niveles excesivos, aumentando los riesgos de contaminación del agua o de estimular el crecimiento de malezas como la verdolaga y el bledo. Un enfoque más sostenible y a largo plazo es depender más de los cultivos de cobertura de leguminosas para proporcionar la mayor parte del nitrógeno necesario para el cultivo y utilizar cultivos de cobertura de granos o pastos para capturar el exceso de nitrógeno liberado de la materia orgánica al final de la temporada para minimizar las pérdidas de nitrógeno por lixiviación (Ver Sección 11.4: Cultivos de Cobertura).
Cuando estos cultivos de cobertura se incorporan al suelo, su nitrógeno, así como el carbono, alimentan a los microorganismos del suelo, apoyando el ciclo de nutrientes. La cosecha de alfalfa de un campo durante varios años puede reducir los altos niveles de fósforo y potasio.
El principal desafío en los sistemas orgánicos es sincronizar la liberación de nutrientes de las fuentes orgánicas, particularmente el nitrógeno, con los requisitos del cultivo. En suelos fríos, los microorganismos son menos activos y la liberación de nutrientes puede ser demasiado lenta para satisfacer las necesidades del cultivo. Una vez que el suelo se calienta, la liberación de nutrientes puede exceder las necesidades del cultivo.
En un enfoque de gestión de nutrientes orgánicos a largo plazo, la mayoría de los nutrientes necesarios para el cultivo estarían en su lugar como materia orgánica antes de que comience la temporada de cultivo. Los nutrientes requeridos por el cultivo en la temporada temprana pueden complementarse con enmiendas orgánicas altamente solubles, como compost de estiércol de aves o productos fertilizantes aprobados orgánicamente (ver Tablas 11.7.4 a 11.7.7).
Estos productos pueden ser costosos, por lo que son más eficientes si se aplican en bandas al momento de la siembra. Según la normativa adicional, el Programa Nacional Orgánico establece que los operadores que usen nitrato de sodio deberán hacerlo de manera que mantenga o mejore los recursos naturales de la operación, incluidos la calidad del suelo y del agua, cumpla con los requisitos de nutrientes del cultivo y fertilidad del suelo, y no constituya más del 20% del requerimiento total de nitrógeno del cultivo. Confirmar esta práctica con el certificador orgánico antes de la aplicación en el campo.
Las pruebas regulares de suelo ayudan a monitorear los niveles de nutrientes, en particular el fósforo (P) y el potasio (K). Elegir un laboratorio de pruebas de suelo confiable (11.7.1) y usarlo de manera consistente para evitar desigualdades causadas por diferentes métodos de extracción de suelo. Mantener un pH del suelo entre 6.3 y 6.8 maximizará la disponibilidad de todos los nutrientes para las plantas.
Tabla 11.7.1: Laboratorios de Pruebas de Nutrientes
| Laboratorio | Suelos | Compost/ Estiércol | Forraje |
|---|---|---|---|
| Waypoint Analytical | x | x | x |
| Penn State Ag Analytical Services Lab | x | x | |
| Dairy One Soil Analysis | x | x | x |
| University of Massachusetts | x | x |
Desarrollar un plan para estimar la cantidad de nutrientes que serán liberados a partir de la materia orgánica del suelo, cultivos de cobertura, compost y estiércol. Una estrategia para hacer esto se describe en la Sección 11.7.2: Preparación de un Presupuesto de Nutrientes Orgánicos.
11.7.1 Requisitos de Fertilidad
Las recomendaciones de los capítulos específicos de cultivos proporcionan los requisitos de nutrientes de cada cultivo. Estas recomendaciones se basan en las necesidades totales de la planta entera y suponen el uso de fertilizantes sintéticos. La experiencia de agricultores e investigadores sugiere que niveles más bajos pueden ser suficientes en sistemas orgánicos. Las necesidades de nitrógeno no se incluyen porque los niveles de N disponible cambian en respuesta a la temperatura y humedad del suelo, el potencial de mineralización de N y la lixiviación. La mayor cantidad posible de nutrientes debe provenir de cultivos de cobertura, estiércol y adiciones de compost en temporadas anteriores.
Si el cultivo se va a cultivar con mulching plástico, el nivel de nitrógeno puede reducirse. La humedad más uniforme y las temperaturas más cálidas bajo el mulching plástico aumentan la tasa de descomposición de la materia orgánica del suelo, lo que incrementa el nitrógeno disponible.
La fuente de estos nutrientes depende del tipo de suelo y de la gestión histórica del suelo. Algunos suelos son naturalmente ricos en fósforo (P) y potasio (K), o tienen un historial de aplicaciones de estiércol que han resultado en niveles elevados. Los nutrientes adicionales disponibles para las plantas son proporcionados por la materia orgánica del suelo descompuesta o mediante enmiendas específicas de nutrientes solubles aplicadas durante la temporada de crecimiento en sistemas gestionados orgánicamente. Existen muchos tipos de fertilizantes orgánicos disponibles para complementar los nutrientes suministrados por el suelo. SIEMPRE consultar con el certificador antes de usar cualquier producto para asegurarse de que esté aprobado.
11.7.2 Preparación de un Presupuesto de Nutrientes Orgánicos
Asegurar un suministro adecuado de nutrientes cuando el cultivo los necesita requiere una planificación cuidadosa. Desarrollar un presupuesto de nitrógeno orgánico puede ayudar a estimar la cantidad de nutrientes liberados por diversas enmiendas orgánicas, así como por la materia orgánica nativa del suelo. La Tabla 11.7.4 estima el contenido común de nutrientes en estiércoles animales; sin embargo, el contenido real de nutrientes en compost y estiércol debe ser probado justo antes de la aplicación. El análisis de otras enmiendas, así como de cultivos de cobertura, se puede estimar utilizando valores publicados. Mantener registros de estas entradas de nutrientes y del desempeño posterior del cultivo ayudará a evaluar si el plan está proporcionando una fertilidad adecuada durante la temporada para cumplir con los objetivos de producción.
Recordar que con un enfoque a largo plazo para la fertilidad del suelo orgánico, las tasas de mineralización de nitrógeno del suelo aumentarán. Esto significa que habrá más N disponible de las enmiendas orgánicas debido al aumento de la actividad y diversidad microbiana del suelo. Alimentar a estos organismos con diferentes tipos de materia orgánica es esencial para construir este tipo de comunidad biológica diversa y asegurar la productividad orgánica del suelo y del cultivo a largo plazo. Considerar enviar muestras de suelo para una Prueba de Salud del Suelo de Cornell (http://soilhealth.cals.cornell.edu). Esta prueba incluye una estimación de la tasa de mineralización de nitrógeno, que indica el potencial de liberación de N a partir de la materia orgánica del suelo. Probar los suelos con el tiempo puede ser útil para monitorear cambios en la tasa de mineralización de nitrógeno durante la transición y, con el tiempo, en la producción orgánica.
Estimar la liberación total de nutrientes del suelo y compararla con los resultados y recomendaciones de las pruebas de suelo requiere mantener registros y realizar algunos cálculos simples. La Tabla 11.7.2 se puede usar como una hoja de trabajo para calcular los nutrientes suministrados por el suelo en comparación con las necesidades totales del cultivo.
Tabla 11.7.2. Cálculo de Créditos y Necesidades de Nutrientes
| Nitrógeno (N) lbs/acre | Fosfato (P2O5) lbs/acre | Óxido de potasio (K2O) lbs/acre | |
|---|---|---|---|
| 1. Necesidades totales de nutrientes de los cultivos | |||
| 2. Recomendaciones basadas en el análisis de suelo | |||
| 3. Créditos | |||
| a. Materia orgánica del suelo | |||
| B. Estiércol | |||
| c. Compost | |||
| d. Cultivo de cobertura previo | |||
| 4. Créditos Totales: | |||
| 5. Adicional necesario (2-4) = |
Línea 1. Necesidades Totales de Nutrientes para el Cultivo: Usando las cucurbitáceas como ejemplo, la investigación indica que un cultivo promedio de cucurbitáceas requiere 100 lbs. de nitrógeno (N) disponible, 120 lbs. de fósforo (P) y 120 lbs. de potasio (K) por acre para apoyar un rendimiento medio a alto.
Línea 2. Recomendaciones Basadas en el Análisis de Suelo: Utilizar la Tabla 11.7.3 para determinar la cantidad de P y K necesarios según los resultados del análisis de suelo.
Tabla 11.7.3. Cantidades Recomendadas de Fósforo y Potasio para Cucurbitáceas Basadas en Análisis de Suelo.
| Nivel de Fósforo en el suelo (P2O5 lbs/acre) | Nivel de Potasio en el suelo (K2O lbs/acre) | |||||
|---|---|---|---|---|---|---|
| Nivel mostrado en en análisis de suelo | bajo | medio | alto | bajo | medio | alto |
| Recomendación total de nutrientes | 120 | 80 | 40 | 120 | 80 | 40 |
Línea 3a. Materia Orgánica del Suelo: Usando los valores del análisis de suelo, estimar que se liberarán 20 lbs. de nitrógeno por cada porcentaje de materia orgánica en el suelo.
Línea 3b. Estiércol: Asumir que el estiércol liberará nitrógeno durante 3 años. Basado en el análisis de nitrógeno total en el estiércol aplicado, estimar que el 50% está disponible en el primer año, y luego el 50% de lo restante se libera en cada uno de los siguientes dos años. Para una tasa de aplicación de 100 lbs. de nitrógeno como estiércol, estarían disponibles 50 lbs. el primer año, 25 lbs. en el año 2, y 12.5 lbs. en el año 3. Recordar que cualquier aplicación de estiércol crudo debe realizarse al menos 120 días antes de la cosecha de un cultivo de vegetales.
Línea 3c. Compost: Estimar que del 10 al 25% del nitrógeno contenido en el compost estará disponible en el primer año. La madurez del compost influirá en la cantidad de nitrógeno disponible. Si el material es inmaduro, es posible que más nitrógeno esté disponible para el cultivo en el primer año. Como precaución: utilizar compost para satisfacer las necesidades nutricionales del cultivo generalmente no es una estrategia financieramente viable. El volumen total necesario puede ser muy costoso en relación con las unidades de nitrógeno disponibles para el cultivo. La mayoría de los composts estables deben considerarse como acondicionadores del suelo, mejorando la salud del suelo, la diversidad microbiana, la estructura y la capacidad de retención de nutrientes. Cualquier compost aplicado en granjas orgánicas debe estar aprobado para su uso por tu certificador de granja. El compost generado en la producción agrícola debe seguir un proceso aprobado por el certificador.
Línea 3d. Cultivos de Cobertura: Consultar los recursos sobre cultivos de cobertura listados en la sección 11.4 para estimar la cantidad de nitrógeno fijado por los cultivos de cobertura de leguminosas. Estimar que el 50% del nitrógeno fijado se libera para la absorción de la planta en la temporada actual.
Línea 4. Créditos Totales: Sumar los diversos valores de nitrógeno de la materia orgánica, compost y cultivos de cobertura para estimar el potencial de suministro de nitrógeno del suelo (ver ejemplo a continuación). No hay garantía de que estas cantidades estén realmente disponibles en la temporada, ya que las temperaturas del suelo, el agua y la fisiología de los cultivos impactan la liberación y absorción de estos nutrientes del suelo. Si el nitrógeno disponible no alcanza el requisito mínimo para este cultivo (~90 lbs/acre), puede ser necesario realizar una aplicación de nitrógeno orgánico en el costado. Existen varias fuentes de nitrógeno para la aplicación de costado orgánico (ver Tabla 11.7.5), así como composts pelletizados. Si se está en las primeras etapas de la transición orgánica, el agricultor puede considerar aumentar el suministro de nitrógeno en el presupuesto en un 30% para ayudar a reducir algunos de los riesgos de que el nitrógeno sea limitante para el cultivo.
La Tabla 11.7.4 incluye estimaciones generales de la disponibilidad de nutrientes para estiércoles y composts, pero estas pueden variar ampliamente dependiendo de la alimentación animal, la gestión del pastoreo, la antigüedad del estiércol, la cantidad y tipo de cama, y muchos otros factores. Las aplicaciones de estiércol pueden no estar permitidas por el certificador o comercializador, incluso si se aplican 120 días antes de la cosecha.
Un ejemplo de cómo determinar las necesidades de nutrientes de los cultivos: Vas a cultivar una acre de calabaza de invierno. Las Guías Integradas de Manejo de Cultivos y Plagas de Cornell sugieren una necesidad total de nutrientes para un cultivo de cucurbitáceas de 100 lb. de N, 120 lb. de P y 120 lb. de K por acre para un cultivo de alto rendimiento. Las pruebas de suelo muestran un pH de 6.5, con niveles medios de P y bajos de K, y recomiendan 80 lbs de P2O5/acre y 120 lbs de K2O/acre (ver Tabla 11.7.4). El campo que se plantará tiene 2% de materia orgánica y hay un cultivo de trébol rojo que se incorporará al suelo una semana antes de la siembra (ver recursos listados en la sección 11.3). La temporada pasada inyectaste 1000 galones de estiércol líquido de cerdo en el rastrojo de trébol rojo después de tomar el último corte de heno.
La Tabla 11.7.4 indica que se liberarán alrededor de 25 lbs. de N en la primera temporada a partir de 1000 galones de estiércol de cerdo inyectado. Se estima que cada porcentaje de materia orgánica liberará alrededor de 20 lbs. de N, por lo que el 2% de materia orgánica del suelo proporcionará 40 lbs. de N (línea 3a). Consultando el Northeast Cover Crops Handbook, estimamos que el cultivo de cobertura de trébol rojo liberará aproximadamente la mitad de su N fijado, es decir, 50 lbs. a medida que se descompone (línea 3d), para un total estimado de N liberado y disponible para la absorción por las plantas de 115 lbs. por acre. Las 44 lbs. de P liberadas del estiércol inyectado necesitarán ser complementadas con 40 lbs adicionales de P a través de la aplicación de aproximadamente 250 lbs/A de harina de hueso (Tabla 11.7.6) para cumplir con la recomendación de la prueba de suelo de 80 lbs por acre. También será necesario complementar el potasio en este ejemplo. El estiércol suministra 23 de las 120 lbs. necesarias.
Las restantes ~100 lbs. de K2O/acre pueden ser incorporadas mediante la difusión de 200 lbs. de sulfato de potasio de un producto aprobado orgánicamente, si las pruebas de suelo indican suficiente magnesio. Si se necesita magnesio, entonces se deben aplicar ~450 lbs. de Sul-Po-Mag por acre (Tabla 11.7.7).
Tabla 11.7.4. Contenido de Nutrientes de Estiércol Animal Común y Compost de Estiércol.
A. N1 es una estimación del total de N disponible para la absorción por las plantas cuando el estiércol se incorpora dentro de las 12 horas posteriores a la aplicación.
B. N2 es una estimación del total de N disponible para la absorción por las plantas cuando el estiércol se incorpora después de 7 días.
C. Estiercol de aves compostado y pelletizado. (Disponible en Nueva York de Kreher's).
D. inyectado
E. incorporado
Adaptado de "Using Manure and Compost as Nutrient Sources for Fruit and Vegetable Crops" por Carl Rosen y Peter Bierman (https://hdl.handle.net/11299/200639) y Penn State Agronomy Guide (http://extension.psu.edu/agronomy-guide)
Tabla 11.7.5. Nitrógeno Disponible en Fertilizantes Orgánicos.
| Libras de Fertilizante/Acre para Proporcionar X Libras de N por Acre | |||||
|---|---|---|---|---|---|
| Fuentes | 20 | 40 | 60 | 80 | 100 |
| Harina de sange, 13% N | 150 | 310 | 460 | 620 | 770 |
| Harina de soya 6% N (x 1.5)a también contiene 2% P y 3% K2O | 500 | 1000 | 1500 | 2000 | 2500 |
| Harina de pescado 9% N, también contiene 6% P2O5 | 220 | 440 | 670 | 890 | 1100 |
| Harina de Alfalfa 2.5% N también contiene 2% P y 2% K2O | 800 | 1600 | 2400 | 3200 | 4000 |
| Harina de plumas, 15% N (x 1.5)a | 200 | 400 | 600 | 800 | 1000 |
| Nitrato chileno 16% N no puede exceder el 20% de la necesidad del cultivo | 125 | 250 | 375 | 500 | 625 |
Tabla 11.7.6. Fósforo Disponible en Fertilizantes Orgánicos.
| Libras de Fertilizante/Acre para Proveer X Libras de P2O5 por Acre | |||||
|---|---|---|---|---|---|
| Fuentes | 20 | 40 | 60 | 80 | 100 |
| Harina de hueso. 15% P2O5 | 130 | 270 | 400 | 530 | 670 |
| Roca fosfórica. 30% total P2O5 (x4)a | 270 | 530 | 800 | 1100 | 1300 |
| Harina de pescado, 6% P2O5 (también contiene 9% N) | 330 | 670 | 1000 | 1330 | 1670 |
Tabla 11.7.7. Potasio Disponible en Fertilizantes Orgánicos.
| Libras de Fertilizante/Acre para Proveer X Libras de K2O por Acre | |||||
|---|---|---|---|---|---|
| Fuentes | 20 | 40 | 60 | 80 | 100 |
| Sul-Po-Mag 22% K2O también contiene 11% Mg | 90 | 180 | 270 | 360 | 450 |
| Ceniza de madera (seca, fina, gris) 5% K2O, también eleva el pH. | 400 | 800 | 1200 | 1600 | 2000 |
| Harina de Alfalfa 2% K2O también contiene 2.5% N | 1000 | 2000 | 3000 | 4000 | 5000 |
| Arena verde o polvo de granito 1% K2O (x 4) A | 8000 | 16000 | 24000 | 32000 | 40000 |
| Sulfato de potasio 50% K2O | 40 | 80 | 120 | 160 | 200 |
A. Las tasas de aplicación para algunos materiales se multiplican para ajustar sus tasas de liberación lenta a muy lenta. Tablas 11.6.5 - 11.6.7 adaptadas por Vern Grubinger del laboratorio de pruebas de suelos de la Universidad de Maine.
Tabla 11.7.8. Ejemplo: Cálculo de Créditos y Necesidades de Nutrientes Basado en las Recomendaciones de Muestras de Suelo.
| Nitrógeno (N) lbs/acre | Fosfato (P2O5) lbs/acre | Óxido de potasio (K2O) lbs/acre | |
|---|---|---|---|
| 1. Necesidades totales de nutrientes del cultivo: | 100 | 120 | 120 |
| 2. Recomendaciones basadas en el análisis de suelo | # no proporcionado | 80 | 120 |
| 3. Créditos | |||
| a. Materia orgánica del suelo 2% | 40 | - | - |
| b. Estiércol - 1000 gal hog | 25 | 44 | 23 |
| c. Compost - ninguno | 0 | 0 | 0 |
| d. Cultivo de cobertura - trébol rojo | 50 | 0 | 0 |
| 4. Creditos totales: | 115 | 44 | 23 |
| 5. Necesidad adicional (2-4) = | 0 | 36 | 97 |
11.8 Uso de Pesticidas Orgánicos
Dado el alto costo de muchos pesticidas y la limitada cantidad de datos de eficacia provenientes de ensayos replicados con productos orgánicos, la importancia de desarrollar un sistema efectivo de prácticas culturales para el manejo de insectos y enfermedades no puede subestimarse. No se debe depender de los pesticidas como método principal de control de plagas.
La vigilancia y la previsión son importantes para detectar los síntomas de las enfermedades en una etapa temprana. Cuando las condiciones justifican una aplicación, la elección adecuada de materiales, el momento correcto y una excelente cobertura del spray son esenciales.
11.8.1 Calibración y Aplicación de Pulverizadores
La calibración de los pulverizadores es especialmente crítica cuando se usan pesticidas orgánicos, ya que su efectividad a veces es limitada. Por esta razón, tienden a requerir las mejores condiciones de pulverización para ser efectivos. Leer la etiqueta cuidadosamente para familiarizarse con los requisitos únicos de algunos productos, especialmente aquellos con organismos biológicos vivos como ingrediente activo (por ejemplo, Contans WG). Los ingredientes activos de algunos pesticidas biológicos (por ejemplo, Serenade y Sonata) son en realidad subproductos metabólicos del organismo. Calcular el caudal de las boquillas y la velocidad de desplazamiento son dos componentes clave necesarios para aplicar una dosis precisa de pesticida por acre.
Aplicar demasiado pesticida es ilegal, puede ser inseguro y costoso, mientras que aplicar muy poco puede no controlar las plagas o llevar a la resistencia a los pesticidas.
Recursos:
- Capítulo 6: Información y Uso de Pesticidas
- Calibración de Pulverizadores de Mochila - Disponible en inglés
pesticidestewardship.org/calibration/Pages/BackpackSprayer.aspx
- Páginas de Calibración de Stewardship Ambiental de Pesticidas - Disponible en inglés
pesticidestewardship.org/calibration/
11.8.2 Consideraciones Regulatorias
La producción orgánica se enfoca en técnicas culturales, biológicas y mecánicas para manejar plagas en la finca, pero en algunos casos se necesitan pesticidas, que incluyen repelentes, permitidos para la producción orgánica. Los pesticidas mencionados en esta guía están registrados por la Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos (EPA - por sus siglas en inglés) o cumplen con los requisitos de la EPA para un pesticida de "riesgo mínimo".
Al momento de la publicación, los pesticidas mencionados en esta guía también cumplen con los requisitos de registro del Departamento de Conservación Ambiental del Estado de Nueva York (NYSDEC) para su uso en el Estado de Nueva York. Consultar el sitio web NYSPAD del NYSDEC para obtener información sobre los pesticidas actualmente registrados para su uso en el Estado de Nueva York. Pueden estar disponibles productos adicionales para su uso en otros estados.
Para mantener la certificación orgánica, los productos aplicados deben cumplir con las regulaciones del Programa Nacional Orgánico (NOP, por sus siglas en inglés) según lo establecido en 7 CFR Parte 205, secciones 600-606. El Instituto de Revisión de Materiales Orgánicos (OMRI, por sus siglas en inglés) es una organización que revisa productos para verificar el cumplimiento con las regulaciones del NOP y publica listas de productos conformes, pero otras entidades también realizan evaluaciones de productos. Los agricultores orgánicos no están obligados a utilizar únicamente materiales listados por OMRI, pero la lista es un buen punto de partida al buscar pesticidas permitidos.
Finalmente, las negocios agrícolas con ingresos anuales superiores a $5,000 y que etiquetan productos como orgánicos deben estar certificadas por un certificador acreditado por el NOP, quien debe aprobar cualquier material aplicado para el manejo de plagas. SIEMPRE consultar con el certificador antes de aplicar cualquier producto para el control de plagas. Algunos certificadores revisarán los productos para cumplir con el NOP.
Tener en cuenta que los "remedios caseros" no pueden ser utilizados. Los remedios caseros son productos que pueden tener propiedades que reducen el impacto de las plagas. Ejemplos de remedios caseros incluyen el uso de cerveza como cebo para reducir el daño de babosas en fresas o detergente para platos para reducir los pulgones en plantas. Estos materiales no están regulados como pesticidas, no están exentos de registro, y por lo tanto no son legales de usar.
¿Es necesario ser un aplicador de pesticidas certificado? La Ley Federal de Insecticidas, Fungicidas y Roedores (FIFRA, por sus siglas en inglés) define dos categorías de pesticidas: de uso general y de uso restringido. El Departamento de Conservación Ambiental del Estado de Nueva York (NYS DEC) también define pesticidas de uso restringido adicionales. Se requiere la certificación de aplicador de pesticidas para comprar y usar pesticidas de uso restringido. Los agricultores que compran y usan solo pesticidas de uso general en propiedades que poseen o alquilan no necesitan ser aplicadores de pesticidas certificados.
Sin embargo, se recomienda que cualquier persona que aplique pesticidas se certifique. Para obtener más información sobre la certificación de aplicadores de pesticidas, consultar la lista de Agencias Estatales Reguladoras de Pesticidas o, en el Estado de Nueva York, visitar el sitio web del Programa de Educación en Seguridad de Pesticidas de Cornell Cooperative Extension (CCE-PSEP) en psep.cce.cornell.edu.Ambas disponibles en inglés.
Capacitación en el Estándar de Protección de Trabajadores. Si el negocio agrícola tiene empleados que trabajarán en campos tratados con pesticidas, deben recibir capacitación como trabajadores o manipuladores según lo requiere el Estándar de Protección de Trabajadores (WPS, por sus siglas en inglés). Consultar la Sección 6.8 en el Capítulo 6 para obtener más detalles sobre el WPS.
11.8.3 Protección de Polinizadores
Las abejas melíferas, las abejas silvestres y otros insectos son importantes para la polinización adecuada de muchos cultivos. Una polinización deficiente resulta en frutos pequeños o con formas extrañas, así como en rendimientos bajos. Por favor, consultar la sección 6.3 en el Capítulo 6 para obtener más información sobre la protección de polinizadores.
11.8.4 Optimización de la Eficiencia de los Pesticidas
La información sobre la efectividad de un pesticida específico contra una plaga determinada a veces puede ser difícil de encontrar. Algunos investigadores universitarios incluyen pesticidas aprobados para la producción orgánica en sus ensayos; algunos fabricantes proporcionan resultados de ensayos en sus sitios web; y algunos agricultores han realizado ensayos por su cuenta. La Guía de Recursos para el Manejo de Insectos y Enfermedades Orgánicas y las guías de producción de cultivos orgánicos de Cornell proporcionan información sobre la eficacia de muchos materiales aprobados. (Esta guía está disponibles en inglés).
En general, los pesticidas permitidos para la producción orgánica pueden eliminar un porcentaje menor de la población de plagas, tener una residualidad más corta y descomponerse rápidamente en el medio ambiente. Leer el etiquetado del pesticida cuidadosamente para determinar si el pH del agua o la dureza afectarán negativamente la eficacia del pesticida. El uso de un surfactante puede mejorar el rendimiento del pesticida orgánico.
Buscar en la Lista de Productos OMRI adyuvantes que cumplan con el NOP. La vigilancia regular y la identificación precisa de plagas son esenciales para una gestión efectiva de plagas. Los umbrales utilizados para la producción convencional pueden no ser útiles para los sistemas orgánicos debido al menor porcentaje de mortalidad y a la menor residualidad de los pesticidas permitidos para la producción orgánica. Cuando se necesitan pesticidas, es importante enfocar el tratamiento en las etapas más vulnerables de la plaga. Cubrir a fondo las superficies de las plantas, especialmente en el caso de los insecticidas, ya que muchos deben ser ingeridos para ser efectivos.
El uso de trampas de feromonas u otras técnicas de monitoreo o predicción puede proporcionar una advertencia temprana para problemas de plagas y ayudar a enfocar efectivamente los esfuerzos de vigilancia.
